Bruselas quiere comprobar la legalidad de acuerdos energéticos con terceros países antes de que se firmen.
La Comisión Europea quiere tener la competencia controlar la compatibilidad de los acuerdos energéticos que los Estados miembros firmen con terceros países con las normas de competencia y la legislación comunitaria sobre mercado interior de la energía antes de que "se negocien, firmen y sellen".
"La UE debe asegurarse de que los acuerdos intergubernamentales firmados por sus Estados miembros con terceros países que resulten pertinentes para la seguridad del gas en la UE sean más transparentes y plenamente conformes con el Derecho de la UE", señala el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
Para garantizar esto, la propuesta recoge la obligación para los países de la UE de informar a la Comisión sobre su intención de iniciar negociaciones con otro país, así como de facilitar el borrador del acuerdo antes de ratificarlo.
"Los Estados miembro no firmarán los acuerdos intergubernamentales hasta que la Comisión no haya dado su opinión", asegura Bruselas, a la vez que subraya que el país de la UE en cuestión tendrá que tener en cuenta esta opinión.
El comisario de Energía y Acción Climática, Miguel Arias Cañete, ha explicado en rueda de prensa que el Ejecutivo comunitario podrá asesor a lo largo de las negociaciones y ser observador del proceso. Finalmente, si el Estado miembro optase por no seguir la opinión expresada por Bruselas, la Comisión podrá iniciar un procedimiento de infracción.
"Con este sistema, lo normal es que un Estado miembro reaccione para completar un acuerdo que cumpla", ha manifestado el comisario español.
Por su parte, el vicepresidente de la Comisión Europea para la Unión Energética, Maros Sefcovic, ha destacado que las dudas sobre la legalidad de uno de estos acuerdos crean incertidumbre para los inversores y problemas legales, unas situaciones que el Ejecutivo comunitario prevé evitar "de la mejor manera posible" con esta propuesta.
MEDIDAS PARA ASEGURAR EL SUMINISTRO ENERGÉTICO
Esta iniciativa se enmarca dentro del paquete de seguridad energética que Bruselas ha presentado este martes y que incorpora además una estrategia sobre gas natural licuado (GNL), un reglamento sobre seguridad en el suministro de gas y una estrategia de calefacción y refrigeración.
En concreto, el reglamento persigue asegurar el suministro de gas en toda la UE en situaciones de emergencia y adopta un enfoque regional a la hora de adoptar medidas para garantizar el abastecimiento.
Para ello, insta a los diferentes países de la UE que se integran en regiones concretas a elaborar evaluaciones de impacto en el suministro ante situaciones excepcionales, como desastres naturales o decisiones políticas concretas. Estos análisis deberán ser notificados a la Comisión Europea antes del 1 de septiembre de 2018.
En la misma línea, las autoridades competentes de cada Estado miembro en cada una de las regiones energéticas se encargarán de establecer de forma conjunta un plan preventivo de acción para mitigar los riesgos identificados, así como un plan de emergencia con medida que puedan ser implementadas ante una interrupción del suministro de gas.
Además, el reglamento introduce un principio de solidaridad mediante el cual los Estados miembros deberán garantizar el suministro a hogares y servicios básicos, como los sanitarios, en el caso en que éste se vea afectado por crisis graves.
"EN CONTRA DE NADIE"
Por otro lado, Arias Cañete ha querido manifestar que la estrategia no va "en contra de nadie", sino que actúa "en favor de los consumidores europeos y la industria europea", y su objetivo es "tener más competencia en el mercado, más diversificación y precios más baratos de la energía".
Con respecto a la misma cuestión, el comisario español ha apuntado que los planes de acción para situaciones de emergencia buscan no solo responder a decisiones políticas, sino también, por ejemplo, al corte de suministro ante rupturas de gaseoductos o catástrofes naturales. "Tenemos que prever toda cuestión posible, incluso un ataque terrorista. No es una estrategia en contra de nadie", ha zanjado.
icnr.es